Corre, antes de que e sol se esconda tras el ocaso, corre, tus ojos se nublan con el sudor de tus parpados, sigue corriendo, que aún el camino es largo, aún el cielo está celeste, aún tienes tiempo para correr. Aunque tu corazón esté latiendo más fuerte que nunca, aunque de tus manos se halla ido toda la energía para entregársela a tus piernas que comienzan a flaquear, aunque tus miedos se transformen en cansancio, tus recuerdos sean pesas que detienen tus piernas, aquellos tormentos, se deben transformar en energía, el escapar es tu meta, deja atrás todo el daño, toda la maldad, deja atrás tu propia vida y que tu meta sea el comienzo de otra vida, corre que aún no llegas a la mitad de tu camino y el sol baja, al igual que el cuchillo, corre, el ocaso es tu cuello, corre, la noche es tu muerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario