El ejercito se alza

un susurro en el viento, mueve las hojas del viejo roble,
el nuevo estudiante de los antiguos tiempos, entiende el mensaje
los cuervos llaman a las almas extraviadas y les muestran el camino,
las flores emiten su aroma, despertando a los guerreros dormidos

Con orgullo en el alma se alzan nuevamente,
Quienes llevan a los antiguos en el corazón,
Las antiguas historias se repiten en nuevos tiempos,
Se fundará de nuevo el pueblo del bosque.

La madre extiende sus brazos para entregar el último consuelo,
la última caricia antes del largo viaje que se avecina.
La madre comparte el pasado, la esperanza del futuro
el pueblo del bosque se prepara para luchar por su tierra.

Los arboles cantan junto al viento, mueven sus hojas para dar aliento,
el hombre preparado puede escuchar la canción,
aprender las palabras sin voz

El bosque completo se alza en una sola voz,
y el ejercito se transforma en parte de ella,
canta junto a ella,
baila junto a ella.

A los infieles que reniegan de su pasado, de su cultura ancestral,
no hay mayor castigo que su propio infierno,
al olvido sus palabras y sus rezos de piedad,
los paganos avanzan por la vida, aprenden sin arrepentirse.

Daana muestra a sus hijos, los aliados de su nuevo pueblo,
la lucha se desata y la sangre es mental,
las espadas son palabras, las victorias en el alma,
las nuevas guerras se pelean con verdad.