viernes, 22 de junio de 2012

Visitante

silencio! tan sólo el silencio oía esa noche,
mi corazón tal vez latía o tal vez no,
no puedo recordar haberlo sentido,
no recuerdo sentir mi propio aliento.

Pues esa sombra despertó en mi corazón
la llama que enciende el temor más terrible
un espectro, un demonio subido desde el infierno
soy  el pecador enjuiciado por Dios.

Una sombra me dije, una sombra nada más
tal ves una pequeña ave había entrado a mi hogar
o tal ves un nocturno murciélago,
ningún caso era realmente terrible

pero que realidad vieron mis ojos
sin aliento, seca totalmente mi boca,
la sed más grande se apoderó de mi alma
mientras mi pecho se encendía y mi frente goteaba

Frente a la muerte me hallaba
y más terrible era de lo que yo creía
sus ojos negros me miraron penetrantes,
directamente con mil voces me habló.

Tranquilo! tranquilo le grité
cual trato podríamos hacer,
acaso un espectro no siente nada
nada de nada, me dijo él

corrí dentro de mi habitación,
como un niño asustado me escondí bajo mi cama
la escena ya parecía cómica y patética
un poco de tiempo nada más te pido.

Sus ojos se volvieron a clavar en los míos
sus brazos se extendieron hacia mí,
tomando mi hombro suavemente me dijo
¿para que más tiempo?, tu miseria ahora puede terminar.

Solo, solo me encontraba le dije al espectro,
solos nacemos y así mismo moriremos respondió,
pero solo en la vida no es vivir,
tu estás muerto hace mucho tiempo

Muerto!, muerto estoy, porque nadie es consiente de mi vida
la misma muerte está más viva que yo,
dame la vida en la muerte,
si quieres un trato, me respondió, te ofrezco vivir en la muerte

No hay comentarios:

Publicar un comentario